23 de abril de 2016

Relato #4 ELLA


No podía evitarlo, no podía dejar de mirarla, no había nada que no le gustara de ella, sus ojos verdes contrastaban con el color negro de su pelo, cortado al estilo “garçon”, dejando sus orejas totalmente a la vista, un poco separadas, lo que vulgarmente se llama “de soplillo”, pero sin ser exagerado, pero sus lóbulos, ufff si los miraba se imaginaba mordisqueándolos, disfrutándolos, suaves, casi podía sentirlos entre sus labios. 

Su nariz respingona le daba un aire infantil que le fascinaba…su boca…labios perfectamente delineados y el volumen perfecto, esponjoso, solo mirarlos le producía una hinchazón en la entrepierna que le cortaba el flujo sanguíneo. 


Su mirada seguía bajando…mmm…ese cuello, ahora sus pupilas ya se estaban dilatando, y sus ojos, ávidos de placer a distancia, siguieron escrutando ese cuerpo que pedía a gritos ser disfrutado. La curva que dibujaban sus pechos sobre esa camisa, haciendo que el botón superior tuviera ganas de separarse de su ojal, la cintura pidiendo a gritos ser rodeada por un brazo con fuerza para levantarla del suelo, y ese culo debajo de esos vaqueros que parecían haber sido esculpidos únicamente para su cuerpo…desde luego los taconazos le sentaban más que bien.


Su imaginación volaba de un extremo al otro, se imaginaba acercándose a ella en ese mismo momento, en medio de ese bar, y robándole el beso más intenso que nunca le darán, subiéndola encima de la barra, arrancándole toda la ropa, como si le fuera la vida en ello, y pegándole el polvo más alucinante de su vida; y al mismo tiempo la imaginaba en su cama, disfrutándose mutuamente despacio, tiernamente, haciéndose el amor mientras sus ojos necesitando la droga de sus miradas no eran capaces ni de pestañear. 


Sonreía mientras la follaba con su mirada, en el mismo momento en que se decidió a dar un paso hacia ella, en el mismo momento en que un hombre se paraba al lado de su compañera imaginaria abrazándola y besándola, y en ese mismo momento una mano tocando su hombro le devolvió a la realidad, se giró y vió a su mujer… “Cariño, vámonos ya, tenemos que recoger a los niños del cole”  
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8 comentarios:

  1. Qué bueno el final, no me lo esperaba, jajajaja

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    1. el final? A más de un casado o casada se le han pasado por la cabeza este tipo de pensamientos en algún momento...jeje Gracias por tomarte tu tiempo en comentar 😘

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  2. Mmmmm... el gran poder de la imaginación. Quién no se ha dejado seducir por los encantos de algún desconocido que, despertando nuestro deseo, no nos ha hecho falta tocarle ni un pelo para llegar con él al más devastador de los orgasmos mentales?? bueno, quizá me he pasado un poco jejeje pero soy así de empática. Este relato ha sido como leer mis propios pensamientos cualquier mañana de camino al trabajo ;) Mis más agradecidas felicitaciones ;)

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    1. Que te has pasado? Te crees que el protagonista esa noche no habrá llegado a ese devastador orgasmo pensando en ella?😜 Gracias mi niña!!😘

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  3. uyyyy que calenton jejejjee, muy chulo y ese final me encanto jajajajajaa

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